Las comunidades de la Costa del Golfo han sido las más afectadas por la contaminación y las violaciones de seguridad de la industria del petróleo y el gas durante décadas. La creciente gravedad de los impactos climáticos en la región también ha expuesto todo el peso del impacto destructivo de la industria.
Pero a medida que se aceleró el auge del fracking de la Cuenca Pérmica, la industria intensificó la carga que impone a las poblaciones Indígenas, Negras, Marrones y de bajos ingresos, que han sufrido mucho y que también se extendió a comunidades que hasta hace poco se habían salvado. La expansión de oleoductos y gasoductos, terminales de exportación, parques de tanques e instalaciones petroquímicas ha sido intensa.
NO se alimenta de la creciente demanda estadounidense de petróleo y gas, como ha sucedido en el pasado, sino de las exportaciones a los mercados mundiales.
Levantamiento de la prohibición de exportación de petróleo crudo, desbloqueando el crecimiento de la producción de Pérmica
No es una coincidencia que el crecimiento de la producción en la Cuenca Pérmica se aceleró después de que el Congreso levantara las restricciones a la exportación de petróleo crudo a fines de 2015. Esto fue clave para el crecimiento de la producción de petróleo de la Pérmica del 135% entre 2015 y 2020. De hecho, después de que se levantó la prohibición, la producción de petróleo de Pérmica creció al mismo ritmo que las exportaciones de crudo de la Costa del Golfo.
Durante este tiempo, las exportaciones de crudo de EE. UU. pasaron del 5% de la producción de petróleo de EE. UU. antes de que se levantara la prohibición (principalmente a Canadá, que estaba exento), al 30% en 2020.
Un estudio publicado a principios de 2020 mostró que restablecer la prohibición de exportación de petróleo podría conducir a reducciones en las emisiones globales de carbono de hasta 73 a 165 millones de toneladas métricas de CO₂-equivalente cada año – comparable al cierre de 19 a 42 plantas de carbón.
Pero mientras que el petróleo impulsa la perforación y el fracking en la Pérmica, el auge de las exportaciones no se limita al crudo. Como dijo un ejecutivo de una compañía de GNL en 2019, "cada hidrocarburo incremental producido [en la Cuenca Pérmica] a partir de este día en adelante — ya sea petróleo, líquidos o gas, debe exportarse".
Las exportaciones de gas metano fósil también han crecido de forma agresiva. Tanto por gasoducto a México, como vía licuefacción de gas (GNL) para exportación por barco a mercados globales, principalmente Asia y Europa. La Costa del Golfo alberga la gran mayoría de la capacidad de exportación de GNL de EE. UU., con cuatro terminales ya en funcionamiento. A finales de 2021, se estaban construyendo dos terminales más y se han propuesto hasta 18 más.
Desde que la primera terminal de GNL de EE. UU. comenzó a exportar a principios de 2016, las exportaciones de gas de EE. UU., que anteriormente se realizaban principalmente a través de gasoductos a Canadá y México, se han triplicado. En 2020, EE. UU. exportó el 16% de la producción de gas. Si la cosecha actual de plantas de GNL propuestas sigue adelante, esta podría crecer sustancialmente.
La proliferación de terminales de GNL en la costa del Golfo representa una amenaza existencial para las comunidades que enfrentan décadas de vivir con la contaminación y los riesgos de seguridad que traen estas instalaciones. Además, la exportación de gas metano fósil a los mercados globales amenaza con bloquear las emisiones y construir un muro contra la descarbonización total del sector energético en los países importadores, debido a los contratos a largo plazo que requiere el comercio.
Un vasto complejo industrial: el crecimiento de las exportaciones conduce a la expansión de la infraestructura
El levantamiento de la prohibición de exportación de petróleo no fue suficiente por sí solo para desencadenar el doble auge de la producción y las exportaciones en la Pérmica y la Costa del Golfo. Se tuvo que construir una vasta red de tuberías, plantas de procesamiento, parques de tanques de almacenamiento y terminales de exportación.
Esta infraestructura carga a las comunidades con riesgos de contaminación y seguridad, y encierra un sistema de suministro de energía y químicos que el mundo ya no puede sostener.
La construcción de tuberías en los últimos cinco años ha sido particularmente intensa. Hoy en día, la atención se centra más en las instalaciones de exportación, en particular para el petróleo crudo y el gas (GNL). Si tiene éxito, la capacidad de exportación adicional podría reducir el costo y acelerar las exportaciones de crudo.
Una mayor capacidad de exportación de GNL podría bloquear el suministro de gas a los países que podrían estar pasando más rápidamente a las energías renovables. Toda esta infraestructura amenaza a las comunidades de la Costa del Golfo con un futuro tóxico y peligroso.
Tuberías
Desde finales de 2015, cuando se levantó la prohibición de exportación de petróleo, se han construido más de 12,000 millas de tuberías para transportar líquidos de petróleo y gas, dentro de la cuenca y desde la cuenca hasta México, la costa del Golfo y otros lugares. Tres importantes oleoductos de crudo que se pusieron en funcionamiento en 2019 y principios de 2020 conectan directamente la Cuenca Pérmica con las terminales de exportación de petróleo en Corpus Christi, Texas. Como resultado, Corpus Christi se ha convertido en el puerto exportador de petróleo más grande del país en 2020, exportando alrededor de 1.5 millones de barriles por día, aproximadamente el 50% de las exportaciones de petróleo crudo de Estados Unidos.
Aproximadamente 3,000 millas de gasoductos se han construido dentro y desde la Cuenca Pérmica desde 2015. Gran parte de esto ha sido hacia México o la Costa del Golfo para alimentar las exportaciones de GNL. Si la producción de gas continúa creciendo al ritmo proyectado, se pueden construir más gasoductos.
Terminales de Exportación
Petróleo Crudo
Desde que se levantó la prohibición de exportación de petróleo crudo, la capacidad de las terminales de exportación de la Costa del Golfo se ha multiplicado por más de tres. Con más de siete millones de bpd de capacidad en la actualidad, las terminales existentes de la Costa del Golfo son capaces de exportar más del 60% de la producción de petróleo de EE. UU. Sin embargo, actualmente solo se exportan alrededor de 3 millones de bpd en promedio. A pesar de esta capacidad excedente, las empresas están presionando para construir nuevas terminales que puedan cargar barcos más grandes más rápido, generando mayores ganancias para los exportadores e incentivando un crecimiento de la producción más rápido en la Pérmica.
Varias solicitudes de permisos están en curso para la construcción de instalaciones para cargar portadores grandísimos de petróleo crudo (“VLCC” en inglés). Estos petroleros masivos pueden contener dos millones de barriles de petróleo y tienen demanda porque volúmenes tan grandes permiten menores costos de envío por barril. Actualmente, ninguna terminal de exportación de petróleo de EE. UU. puede cargar completamente un VLCC en el puerto, debido al calado o la profundidad del agua, necesarios para acomodar el enorme barco cuando está completamente cargado.
Un puñado de terminales puede cargar VLCC parcialmente. Pero después de cierto punto, tienen que terminar de cargar transportando petróleo al VLCC en aguas más profundas utilizando barcos más pequeños. El tiempo y el costo adicionales de esto significa que los exportadores de petróleo están perdiendo ganancias adicionales. En busca de esa ganancia adicional, varios proyectos de VLCC están en el proceso de obtención de permisos en medio de la oposición concertada de la comunidad.
En el pequeño pueblo de Freeport, Texas (población 12,000), los residentes ya luchan con altas tasas de asma y problemas de salud respiratoria. El área alberga dos plantas petroquímicas existentes, una planta de GNL de reciente construcción y numerosas tuberías que atraviesan el área. Ahora enfrentan propuestas para construir no una, sino dos terminales VLCC a siete millas de distancia. Las terminales cargarían VLCC en alta mar, pero eso implica tuberías y tanques de almacenamiento en tierra. Los residentes temen un aumento del 25% en las ya elevadas emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COV) si se construyen ambas terminales.
Propuestas de terminal de exportación de petróleo VLCC de Freeport, Texas
Sea Port Oil Terminal (SPOT)
Comunidades afectadas: Surfside Beach, Oyster Creek, Freeport, condado de Brazoria, Texas.
Empresas: Enbridge & Enterprise
Estado: Las empresas alcanzaron la decisión final de inversión (FID en inglés) en julio de 2019, pero el proyecto no había recibido permisos de la Guardia Costera de los Estados Unidos (USCG) y la Administración Marítima (MARAD) hasta noviembre de 2021.
Detalles: SPOT transportaría hasta dos millones de barriles de petróleo crudo todos los días a través de 50 millas de un nuevo oleoducto hasta una nueva instalación de almacenamiento de petróleo en Oyster Creek, Texas. Desde allí, oleoductos gemelos atravesarían la ciudad de Surfside Beach y entrarían en el océano hasta una plataforma de carga a 30 millas de la costa del Golfo. Las instalaciones de carga en alta mar están diseñadas para VLCC, lo que permite cargar un VLCC (2 millones de barriles) cada 24 horas. El proyecto cruzaría 129 cuerpos de agua en ruta hacia la costa, amenazando humedales, vías fluviales y el agua de pozo de la que depende la comunidad de Surfside.
Apoyar a las comunidades que se resisten a SPOT.
Texas GulfLink
Comunidades afectadas: Jones Creek, Freeport, condado de Brazoria.
Compañía: Sentinel Midstream
Estado: (noviembre de 2021) Pre-FID. Permiso aún en trámite.
Detalles: Similar a SPOT, GulfLink tiene como objetivo transportar hasta 2 millones de barriles por día de petróleo a través de un oleoducto de 42 pulgadas a instalaciones de carga de VLCC en aguas profundas en alta mar diseñadas para cargar un VLCC en 24 horas.
GNL
El mayor desarrollo de la capacidad de exportación de GNL se estancó al comienzo de la crisis de COVID, ya que la demanda mundial de gas se desplomó. En 2020, solo una nueva instalación de exportación de GNL, ubicada en México, alcanzó FID. Este proyecto exportará gas de la Cuenca Pérmica a través de gasoductos construidos durante los últimos cinco años. El proyecto Annova LNG, uno de los tres proyectos propuestos en Brownsville, Texas, fue cancelado en marzo de 2021. Varios otros proyectos propuestos parecen estar estancados.
Actualmente, se encuentran en construcción dos proyectos, habiendo realizado FID antes de la crisis de COVID. El proyecto Calcasieu Pass en Cameron Parish, Louisiana, que está programado para comenzar a exportar GNL a principios de 2022. El otro proyecto es el proyecto Golden Pass en Sabine Pass, Texas, que está programado para completarse en 2024.
Pero después de un invierno frío en Asia y Europa, y las interrupciones de la cadena de suministro relacionadas con COVID, la demanda de gas en Asia se ha disparado y el comercio mundial de GNL está en auge. Esto no durará necesariamente. Pero algunas instalaciones propuestas de Gulf Coast LNG se están acercando poco a poco a hacer FID, ya que firman acuerdos de suministro con comerciantes globales de productos básicos. El mapa muestra todos los proyectos actualmente en operación, en construcción y propuestos. Dos proyectos en los que estamos enfocados actualmente son:
Rio Grande LNG
Comunidades afectadas: Brownsville, Port Isabel, condado de Cameron, Texas.
Compañía: NextDecade.
Estado: (noviembre de 2021) Pre-FID
Finanzas: Macquarie Capital y Société Générale fueron nombrados asesores financieros en 2017. No ha surgido información firme de los patrocinadores financieros a noviembre de 2021.
Detalles: Rio Grande LNG es la más grande de las tres terminales de exportación de GNL propuestas en Brownsville, Texas, una de las cuales, Annova LNG, fue cancelada a principios de 2021. Rio Grande LNG se propone como una instalación de exportación de 27 millones de toneladas por año. El proyecto amenaza la calidad del aire y el agua en comunidades marginadas y de bajos ingresos. Las comunidades Indígenas de la zona han desafiado el proyecto debido a su impacto en sitios de importancia arqueológica y cultural. A fines de 2020, la empresa de servicios públicos francesa Engie se retiró de las negociaciones por un contrato de 20 años para comprar GNL del proyecto, que muchos vincularon con el alto impacto ambiental del gas de la Cuenca Pérmica. NextDecade está proponiendo actualmente agregar captura y almacenamiento de carbono (CAC) a la instalación en un movimiento para lavar de verde los impactos climáticos sustanciales del proyecto. La CAC nunca se ha aplicado a una planta de GNL antes e incluso si tiene éxito no abordará la justicia ambiental local y los impactos climáticos más amplios. Otro proyecto, Texas GNL, también enfrenta la oposición de la comunidad. Más detalles Toma acción
Plaquemines LNG
Comunidades afectadas: Ironton, Plaquemines Parish, Louisiana.
Compañía: Venture Global LNG
Estado: (noviembre de 2021) Pre-FID
Financiamiento: Se acordó un préstamo de US$500 millones para la construcción de la terminal con Bank of America, JPMorgan Chase, Mizuho y Morgan Stanley en febrero de 2021.
Detalles: Plaquemines LNG es una instalación de exportación de GNL propuesta de 20 millones de toneladas por año ubicada en el río Mississippi, aguas abajo de Nueva Orleans. El sitio del proyecto se inundó por completo durante el huracán Ida a fines de agosto de 2021. Un equipo de Healthy Gulf voló sobre el sitio 11 días después del huracán y descubrió que el sitio permanecía sumergido. El proyecto alteraría 648 acres de tierra y 80 acres de agua, y los gasoductos relacionados alterarían otros 954 acres. El proyecto también resultaría en la pérdida permanente de 368 acres de humedales. Venture Global también está proponiendo actualmente agregar captura y almacenamiento de carbono (CAC) a la instalación en un movimiento para lavar de verde los impactos climáticos sustanciales del proyecto. La CAC nunca se ha aplicado a una planta de GNL antes e incluso si tiene éxito no abordará la justicia ambiental local y los impactos climáticos más amplios. Más detalles. Tomar acción.
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